Maternidad
De todos los confines de la tierra
vinieron a mí las voces y los ecos,
y fui montaña y valle abierto
y volé alto sobre el mar en su secreto.
Palpitaron en mí las sangres y los versos
y me hice flor y fruto al mismo tiempo
y fui volcán y cascada incandescente,
ansia infinita que culminó entre tus besos.
Fui astros y planetas, cosmos fui,
las selvas me habitaron las entrañas
y la fuerza inagotable de la vida,
como un milagro, anido en mí.
Ciertamente los versos palpitan en ti amiga mia.
ResponderEliminarUn poema cargado de bellas metáforas.
Un abrazo.........
Ada.